Decorar o pintar una única pared de una estancia es una técnica de decoración con mucha trayectoria. Ya sea cambiándole el color, poniendo un material distinto o dejándola sin cubrir, mostrando la estructura interna, esta es una forma de darle un toque mucho más original y único a cualquier espacio.
Esta tendencia se conoce como paredes de acento, ya que lo que se pretende es destacar una de ellas por encima del resto para conseguir un efecto especial; poner el ‘acento’ en una en concreto para que sea la protagonista y todas las miradas vayan hacia allá. Aunque estamos seguros de que la habrás visto ya en algún lugar, sus opciones y posibilidades van mucho más allá de lo que podamos pensar. Hoy queremos que redescubras esta tendencia y, quién sabe, te animes a crear tu propia pared de acento. ¡Vamos allá!
¿Qué es exactamente?
Si nos atenemos únicamente al nombre, seguro que de primeras es difícil entender bien a qué nos estamos refiriendo, pero término de paredes de acento simplemente es una forma de llamar a aquella pared que es distinta a las demás. Esto está, por supuesto, hecho a propósito porque se concibe a la propia superficie como objeto decorativo, queriendo dotarla de protagonismo para que tenga un impacto visual. Se trata de una técnica que, con poco, destaca la zona y enriquece la decoración general de la casa.
Aunque se puede aplicar a cualquier habitación de la vivienda, donde más se suele utilizar es en el salón, ya que además de ser donde más tiempo suele pasarse, se reciben visitas y es donde se tiene la mayor parte de la decoración. La elección del tipo de pared de acento no puede ser aleatoria, puesto que dependerá de los colores del resto de paredes, del suelo, de los muebles existentes y de la cantidad de luz natural que reciba la estancia, además del tamaño de la misma y de las texturas que existan (en el sofá, en los cojines, en las cortinas…).
Otro elemento a tener en cuenta es la sensación que buscamos tener en la habitación: ¿queremos orden o calidez? Nuestro propósito también condicionará la elección, pues al final los cambios que realizamos en los hogares están alineados con nuestro interior.
¿Cómo conseguirla?
Además de para darle un toque distinto y único a nuestro espacio, las paredes de acento también suelen utilizarse para separar visualmente zonas que no cuentan con barreras físicas que hagan esa función, cosa que ocurre en espacios tipo loft. Sea como sea, el proceso para conseguirlas es el mismo. Tendrás que tener en cuenta ciertas características:
Lugar
Recuerda siempre que en todas las estancias se pueden aplicar paredes de acento, cada una diferente de la otra. En el dormitorio, por ejemplo, suele situarse en la pared del cabecero, mientras que en el salón suele ser la pared del sofá, de la chimenea o la televisión. Todo dependerá, de lo que quieras conseguir y de la distribución que tengas actualmente.
Nuestra recomendación es que analices el espacio en distintas horas del día para que observes cómo entra la luz y durante cuánto tiempo; puede que descubras que una zona se queda un poco más oscura y sea la pared perfecta a la que darle un poco más de protagonismo. Si quieres poner una pared de este estilo en la cocina, lo mejor es escoger la que esté más despejadas y a la que más le dé la luz. Ten en cuenta que este espacio tiene que ser práctico ante todo, por lo que no tiene sentido poner una pared de acento a costa de quitar todos los utensilios.
Color
Esta decisión estará determinada por el efecto que busques. Ten en cuenta que los colores fríos ayudarán a percibir la habitación más grande y amplia, por lo que seguramente tengas que añadir algún toque de madera o de elementos naturales para aportar un poco de calidez.
Por otra parte, los colores cálidos empequeñecerán un poco el espacio, pero a cambio ofrecerán un ambiente hogareño, seguro y confortable. Recuerda que también puedes añadir toques en madera para reforzar ese ambiente de cabaña.
Tipos de paredes de acento
A continuación te compartimos algunos tipos de paredes de acento. Hemos seleccionado las que suelen utilizarse con recurrencia y, en general, las que más éxito tienen. Seguro que encuentras un modelo que encaje en tu proyecto.
Pintada
Esta es la forma más popular de aplicar este recurso, ya que es muy fácil y económico pintar una pared de otro color. Puedes elegir prácticamente cualquier tonalidad, pero asegúrate de que encaje con el resto de colores de la estancia. Normalmente, como las paredes suelen ser por defecto de colores claros, para contrarrestar se escoge un color más oscuro, que le dé incluso un toque elegante y sofisticado (si es lo que buscas). Un ejemplo de esto es el proyecto de interiorismo de vivienda neoyorkina, donde la pared azul añade contraste al espacio del comedor.
Con paneles de pared
Una de las mejores maneras de darle importancia a una pared es revistiéndola de algún material, como el metal o la madera. Además, con esto logramos darle un toque tridimensional y original. Si vives en una zona con mucha humedad, te recomendamos que escojas paneles de PVC, ya que resisten al moho.
Con azulejos
Una opción que está comenzando a ser tendencia es cubrir una pared de azulejos, tanto en el exterior como en el interior de una vivienda. Está vinculado con la vuelta de la naturaleza y de los objetos y materiales hechos a mano. El azulejo es además un material práctico, fácil de limpiar y mantener.
Con papel
Junto con la pintura, el papel de pared es una de las opciones más fáciles y simples de darle la vuelta por completo a un espacio. Puedes optar a cientos de diseños llamativos y coloridos con dibujos de todo tipo. Ya que no es un material muy resistente a la humedad, evítalo en zonas donde se pueda condensar agua, como en el baño o en el sótano.
Si el papel es estampado y muy llamativo, además de dejar el resto de paredes desnudas, ten en cuenta escoger una decoración que pase más desapercibida o minimalista en el sentido de que no robe la atención.
Como ves, la opción perfecta no existe. Todo depende del objetivo que tengas en mente, de la estancia que quieras cambiar y del presupuesto con el que cuentes. Una vez tengas claras estos 3 puntos podrás escoger la opción que más se ajuste a tu pared de acento perfecta. Si no sabes cómo elegir la adecuada o cómo combinarla, puedes contar con Manuel Torres Design.
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